La resurrección de los muertos (Wolf Haas)
Título original: Auferstehung der Toten
Traductora: María Esperanza Romero Pérez
Páginas: 176
Publicación: 996 (2011)
Editorial: Siruela
ISBN: 9788498415643
Serie: Brenner 01
Sinopsis: En la apacible localidad alpina de Zell am See, en Austria, la vida transcurre más lenta que en el resto del mundo. Allí no se mata a tiros, sino congelando a las víctimas. Ésta es la suerte que corre una pareja de acaudalados norteamericanos que, en una gélida mañana de invierno, es encontrada muerta en un telesilla. La policía pronto se estrella contra el muro de silencio de los lugareños. Sólo una persona podrá arrojar luz sobre este caso: el ex policía Brenner, a quien su desquiciante lentitud le ha valido perder su puesto. Ahora, como detective privado y sabiendo muy bien cómo las gastan en esta provincia austríaca, deberá resolver este caso.
Lo insólito de este libro está en desmarcarse de la habitual novela negra nórdica, especialmente en el estilo narrativo. El narrador, en tercera persona, cuenta al lector directamente la historia, en plan “coleguita”, usando un estilo muy coloquial. Al principio me pareció sorprendente, divertido y original, pero poco a poco se me fue haciendo pesado, sobre todo porque Wolf Haas en realidad no nos plantea una novela negra al uso, ni tampoco el procedimiento policial ni los fallecidos en el telesilla son en verdad lo más relevante del libro. Y además el abuso de lo coloquial, la dispersión del narrador, la falta de concreción, el escamoteo de información por parte del autor para sorprender con el final... ha hecho que el libro, no muy largo, pasara de parecerme interesante y entretenido a bastante tedioso.
Tom, pequeño Tom, hombrecito Tom (Barbara Constantine)
Título original: Tom, petit Tom, tout petit homme, Tom
Traductor: Braulio García Jaén
Páginas: 224
Publicación: 2009 (2011)
Editorial: Seix Barral
ISBN: 9788432209383
Sinopsis: Esta es la conmovedora historia de un niño que parece un adulto y de una madre que parece una adolescente. Tom tiene once años, y Joss, su madre, veinticuatro. Joss sale a menudo, y Tom se queda solo en la viaje caravana en la que viven. Entonces debe valerse por sí mismo. Para comer, se cuela en los huertos de sus vecinos, donde recoge tomates, zanahorias, patatas... Una noche, buscando un nuevo huerto en el que «hacer la compra», Tom encuentra a Madeleine, una anciana de noventa y tres años, tirada en el suelo entre sus coles, llorando, incapaz de levantarse. Sin duda, Madeleine habría muerto, si Tom, el pequeño Tom, no hubiera estado allí...
Niño y abuela. El pequeño Tom y la anciana Madeleine. El niño es majete. La anciana está muy mayor. La madre, pues una madre adolescente. El libro muy flower power y muy happy. El abuso de frases cortas supone un recurso excesivo que no aporta. Se carga la película “La vida es bella”. Imperdonable. Personajes desaprovechados sin una historia compacta detrás. Buenos ingredientes, los junta, pero están mal mezclados, no hay cohesión suficientemente sólida que sostenga la historia. Búsqueda deliberada de la ternura. Se lee bien, fácil. Gustará a muchos, pero a mí me dejó fría. Nunca el tiempo es perdido, pero a veces…
El que espera (Andrés Neuman)
Páginas: 152
Publicación: 2000
Editorial: Anagrama
ISBN: 9788433924612
Sinopsis: Una ventana misteriosa, un hospital que enferma, un buscador de escarabajos, un violinista histérico, un galán telefónico, un taxista que cede el volante al pasajero, un intelectual de playa, un vampiro melómano. Las situaciones desconcertantes y los personajes disparatados son el germen de esta gozosa sucesión de juguetones cuentos mínimos, de microcuentos escritos en la tradición de maestros como Virgilio Piñera, Juan José Arreola o Augusto Monterroso.
Si me gusta leer relatos y cuentos es porque me agrada encontrar profundidad sin necesidad de que sea de forma explícita, porque me parece que sugieren más mostrando menos. Un buen relato trata al lector con inteligencia, y le ofrece una herramienta, una excusa para desarrollar imaginación y sensibilidad. Por eso escogí este libro de Andrés Neuman para estrenarme con el autor. Y porque esperar es observar, una actividad que se me da muy bien. Y en este libro de esperas algunas han cumplido su objetivo, pero en el balance final tengo que reconocer que quizás no ha sido la mejor aproximación a Neuman, aunque sí he encontrado lo suficiente como para seguir buscando a este autor.
El plantador de tabaco (John Barth)
Título original: The sot-weed factor
Traductor: Eduardo Lago
Páginas: 1176
Publicación: 1960 (2013)
Editorial: Sexto Piso
ISBN: 9788415601302
Sinopsis: Transcurren los últimos años del siglo XVII, y el desafortunado y torpe Ebenezer Cooke es enviado al Nuevo Mundo desde Londres para hacerse cargo de la plantación de tabaco de su padre y escribir La Marylandíada, un poema épico sobre la vida en la colonia de Maryland. Durante su odisea, Cooke es capturado por piratas e indios, pierde la herencia de su padre a manos de unos impostores sin escrúpulos, se enamora de una prostituta campesina, es víctima de conspiraciones secretas, tanto por parte de hombres como de mujeres que quieren robarle su virginidad, y tropieza con una extraordinaria galería de personajes traicioneros que cambian constantemente de identidad.
Esta lectura inició su recorrido hace (bastantes) meses. La empecé del tirón, enganchada a las aventuras de Ebenezer Cooke y el increíble y desconcertante Henry Burlingame. Luego decidí ir leyéndolo tal y como unas cuantas personas están leyendo ahora mismo El Quijote: por capítulos, uno ahora, otro capítulo otro día, otro mes… Y no hace mucho lo terminé. Es una lectura titánica, sin duda, pero diría que tan necesaria como el propio Quijote. No en vano son fácilmente comparables. El plantador de tabaco es un compendio de literatura, un homenaje a la misma y al propio Quijote. Es un libro en el que John Barth disfruta contando y que el lector disfruta leyendo. Divertido, aventurero, folletinesco, satírico, épico… Barth sí que engarza bien todos los ingredientes, y además los utiliza todos (y son muy numerosos). Puedo decir sin temor a equivocarme que es una obra maestra cuyo pilar básico es lo bien narrada que está: narrar por narrar y hacerlo bien. Ingeniería literaria. Hay muchas y muy buenas reseñas sobre este libro y a ellas os remito, sólo tenéis que buscar para que os cuenten más y mejor porqué este libro es necesario en la estantería de cualquier amante de la literatura. Hay una edición de 1991 de la editorial Cátedra que te puede costar la vista, recomiendo sin duda esta edición de Sexto Piso, maravillosa.
Título original: Auferstehung der Toten
Traductora: María Esperanza Romero Pérez
Páginas: 176
Publicación: 996 (2011)
Editorial: Siruela
ISBN: 9788498415643
Serie: Brenner 01
Sinopsis: En la apacible localidad alpina de Zell am See, en Austria, la vida transcurre más lenta que en el resto del mundo. Allí no se mata a tiros, sino congelando a las víctimas. Ésta es la suerte que corre una pareja de acaudalados norteamericanos que, en una gélida mañana de invierno, es encontrada muerta en un telesilla. La policía pronto se estrella contra el muro de silencio de los lugareños. Sólo una persona podrá arrojar luz sobre este caso: el ex policía Brenner, a quien su desquiciante lentitud le ha valido perder su puesto. Ahora, como detective privado y sabiendo muy bien cómo las gastan en esta provincia austríaca, deberá resolver este caso.
Lo insólito de este libro está en desmarcarse de la habitual novela negra nórdica, especialmente en el estilo narrativo. El narrador, en tercera persona, cuenta al lector directamente la historia, en plan “coleguita”, usando un estilo muy coloquial. Al principio me pareció sorprendente, divertido y original, pero poco a poco se me fue haciendo pesado, sobre todo porque Wolf Haas en realidad no nos plantea una novela negra al uso, ni tampoco el procedimiento policial ni los fallecidos en el telesilla son en verdad lo más relevante del libro. Y además el abuso de lo coloquial, la dispersión del narrador, la falta de concreción, el escamoteo de información por parte del autor para sorprender con el final... ha hecho que el libro, no muy largo, pasara de parecerme interesante y entretenido a bastante tedioso.
Tom, pequeño Tom, hombrecito Tom (Barbara Constantine)
Título original: Tom, petit Tom, tout petit homme, Tom
Traductor: Braulio García Jaén
Páginas: 224
Publicación: 2009 (2011)
Editorial: Seix Barral
ISBN: 9788432209383
Sinopsis: Esta es la conmovedora historia de un niño que parece un adulto y de una madre que parece una adolescente. Tom tiene once años, y Joss, su madre, veinticuatro. Joss sale a menudo, y Tom se queda solo en la viaje caravana en la que viven. Entonces debe valerse por sí mismo. Para comer, se cuela en los huertos de sus vecinos, donde recoge tomates, zanahorias, patatas... Una noche, buscando un nuevo huerto en el que «hacer la compra», Tom encuentra a Madeleine, una anciana de noventa y tres años, tirada en el suelo entre sus coles, llorando, incapaz de levantarse. Sin duda, Madeleine habría muerto, si Tom, el pequeño Tom, no hubiera estado allí...
Niño y abuela. El pequeño Tom y la anciana Madeleine. El niño es majete. La anciana está muy mayor. La madre, pues una madre adolescente. El libro muy flower power y muy happy. El abuso de frases cortas supone un recurso excesivo que no aporta. Se carga la película “La vida es bella”. Imperdonable. Personajes desaprovechados sin una historia compacta detrás. Buenos ingredientes, los junta, pero están mal mezclados, no hay cohesión suficientemente sólida que sostenga la historia. Búsqueda deliberada de la ternura. Se lee bien, fácil. Gustará a muchos, pero a mí me dejó fría. Nunca el tiempo es perdido, pero a veces…
El que espera (Andrés Neuman)
Páginas: 152
Publicación: 2000
Editorial: Anagrama
ISBN: 9788433924612
Sinopsis: Una ventana misteriosa, un hospital que enferma, un buscador de escarabajos, un violinista histérico, un galán telefónico, un taxista que cede el volante al pasajero, un intelectual de playa, un vampiro melómano. Las situaciones desconcertantes y los personajes disparatados son el germen de esta gozosa sucesión de juguetones cuentos mínimos, de microcuentos escritos en la tradición de maestros como Virgilio Piñera, Juan José Arreola o Augusto Monterroso.
Si me gusta leer relatos y cuentos es porque me agrada encontrar profundidad sin necesidad de que sea de forma explícita, porque me parece que sugieren más mostrando menos. Un buen relato trata al lector con inteligencia, y le ofrece una herramienta, una excusa para desarrollar imaginación y sensibilidad. Por eso escogí este libro de Andrés Neuman para estrenarme con el autor. Y porque esperar es observar, una actividad que se me da muy bien. Y en este libro de esperas algunas han cumplido su objetivo, pero en el balance final tengo que reconocer que quizás no ha sido la mejor aproximación a Neuman, aunque sí he encontrado lo suficiente como para seguir buscando a este autor.
El plantador de tabaco (John Barth)
Título original: The sot-weed factor
Traductor: Eduardo Lago
Páginas: 1176
Publicación: 1960 (2013)
Editorial: Sexto Piso
ISBN: 9788415601302
Sinopsis: Transcurren los últimos años del siglo XVII, y el desafortunado y torpe Ebenezer Cooke es enviado al Nuevo Mundo desde Londres para hacerse cargo de la plantación de tabaco de su padre y escribir La Marylandíada, un poema épico sobre la vida en la colonia de Maryland. Durante su odisea, Cooke es capturado por piratas e indios, pierde la herencia de su padre a manos de unos impostores sin escrúpulos, se enamora de una prostituta campesina, es víctima de conspiraciones secretas, tanto por parte de hombres como de mujeres que quieren robarle su virginidad, y tropieza con una extraordinaria galería de personajes traicioneros que cambian constantemente de identidad.
Esta lectura inició su recorrido hace (bastantes) meses. La empecé del tirón, enganchada a las aventuras de Ebenezer Cooke y el increíble y desconcertante Henry Burlingame. Luego decidí ir leyéndolo tal y como unas cuantas personas están leyendo ahora mismo El Quijote: por capítulos, uno ahora, otro capítulo otro día, otro mes… Y no hace mucho lo terminé. Es una lectura titánica, sin duda, pero diría que tan necesaria como el propio Quijote. No en vano son fácilmente comparables. El plantador de tabaco es un compendio de literatura, un homenaje a la misma y al propio Quijote. Es un libro en el que John Barth disfruta contando y que el lector disfruta leyendo. Divertido, aventurero, folletinesco, satírico, épico… Barth sí que engarza bien todos los ingredientes, y además los utiliza todos (y son muy numerosos). Puedo decir sin temor a equivocarme que es una obra maestra cuyo pilar básico es lo bien narrada que está: narrar por narrar y hacerlo bien. Ingeniería literaria. Hay muchas y muy buenas reseñas sobre este libro y a ellas os remito, sólo tenéis que buscar para que os cuenten más y mejor porqué este libro es necesario en la estantería de cualquier amante de la literatura. Hay una edición de 1991 de la editorial Cátedra que te puede costar la vista, recomiendo sin duda esta edición de Sexto Piso, maravillosa.
Los combates cotidianos. Edición integral (Manu Larcenet)
Título original: Le combat ordinaire
Traductor: Enrique Sánchez Abulí
Páginas: 264
Publicación: 2003 (2009)
Editorial: Norma
ISBN: 9788467902464
Sinopsis: Esta es la historia de Marco, un ya no tan joven fotógrafo que intenta encajar las piezas de la vida: su trabajo, mujer, su hija, su pasado... Esta es la historia de Marco, un recién estrenado padre que intenta descubrir cómo hacerle ver a su hija que la vida es un regalo, sin perder los nervios. Esta es la historia de Marco, que aún no sabe adónde va.
Con los libros ilustrados y los cómics estoy teniendo suerte. Con este me ha pasado una cosa curiosa. Los dibujos no me llamaban mucho, son como de TBO. Y no es que no me gusten los tebeos, tuve la suerte de vivir (literalmente) entre ellos y fueron mi primera aproximación a la literatura. El caso es que por los dibujos no hubiera sido pero el título, de alguna forma, me dejó un montón de sugerencias en la cabeza y por eso lo cogí de la biblioteca. Y fue un acierto. Me gustan las lecturas en las que me reconozco o me hacen pensar. Esta tiene más de lo segundo que de lo primero, pero tenía de ambas: me vi en algunos momentos y me hizo reflexionar muy mucho sobre bastantes cosas: la relación entre el artista y su obra, cómo puede cambiar nuestra opinión sobre alguien a quien apreciamos cuando conocemos su pasado (y si eso es justo o no)… Pequeñas cargas de profundidad que me estallaban en las manos como fuegos artificiales, que no artificiosos. Recorrido personal y crítica socio-política, uno y otra despertaron mi interés y mi agrado. Muchas frases son pequeñas joyas que te guardas para luego contemplar y reconocer y registrar de nuevo su reflejo. Un protagonista vehemente y contradictorio con el que me he identificado. Un encuentro agradable este cómic. Un RRR: Reconocible, Remueve, Real (y eso, para mi perfil lector, es una virtud).
(©AnaBlasfuemia)
Título original: Le combat ordinaire
Traductor: Enrique Sánchez Abulí
Páginas: 264
Publicación: 2003 (2009)
Editorial: Norma
ISBN: 9788467902464
Sinopsis: Esta es la historia de Marco, un ya no tan joven fotógrafo que intenta encajar las piezas de la vida: su trabajo, mujer, su hija, su pasado... Esta es la historia de Marco, un recién estrenado padre que intenta descubrir cómo hacerle ver a su hija que la vida es un regalo, sin perder los nervios. Esta es la historia de Marco, que aún no sabe adónde va.
Con los libros ilustrados y los cómics estoy teniendo suerte. Con este me ha pasado una cosa curiosa. Los dibujos no me llamaban mucho, son como de TBO. Y no es que no me gusten los tebeos, tuve la suerte de vivir (literalmente) entre ellos y fueron mi primera aproximación a la literatura. El caso es que por los dibujos no hubiera sido pero el título, de alguna forma, me dejó un montón de sugerencias en la cabeza y por eso lo cogí de la biblioteca. Y fue un acierto. Me gustan las lecturas en las que me reconozco o me hacen pensar. Esta tiene más de lo segundo que de lo primero, pero tenía de ambas: me vi en algunos momentos y me hizo reflexionar muy mucho sobre bastantes cosas: la relación entre el artista y su obra, cómo puede cambiar nuestra opinión sobre alguien a quien apreciamos cuando conocemos su pasado (y si eso es justo o no)… Pequeñas cargas de profundidad que me estallaban en las manos como fuegos artificiales, que no artificiosos. Recorrido personal y crítica socio-política, uno y otra despertaron mi interés y mi agrado. Muchas frases son pequeñas joyas que te guardas para luego contemplar y reconocer y registrar de nuevo su reflejo. Un protagonista vehemente y contradictorio con el que me he identificado. Un encuentro agradable este cómic. Un RRR: Reconocible, Remueve, Real (y eso, para mi perfil lector, es una virtud).
(©AnaBlasfuemia)
Me apunto El plantador de tabaco, y no solo el título, sino también la recomendación de leerlo poco a poco... (genial para ir intercalando entre lecturas ;-) )
ResponderEliminar¡Besos!
Pues tú lo has dicho, hay que leerlo así, o al menos yo no he podido hacerlo de otra forma, a ratos y alternando lecturas. Y es que además pesa lo suyo, eh...
EliminarBesos!
El único que me llama la atención es Los combates cotidianos, me lo apunto a ver si lo encuentro en la biblio.
ResponderEliminarBesos.
Yo lo vi en la biblioteca, espero que tengas suerte. Me gustó :)
EliminarBesos!
Uy, esta vez te has lucido. Una tanda muy interesante, casi todos me atraían por la portada o la sinopsis aunque de algunos me has quitado las ganas un poquito, como el de los tomatitos o el de cuentos.
ResponderEliminarNecesitaba una reseña de El plantador de tabaco, un libro que me atrae y me repele a partes iguales, lo primero por su buena pinta y lo segundo por su tamaño. Ahora estoy leyendo un libro gordo pero no tanto y lo estoy haciendo como tú lo has hecho con ese.
En cuanto al cómic, aún tengo esa asignatura pendiente.
Besos.
A mí en principio todos me atraían, pero ya sabes, luego algunos te salen rana... El plantador de tabaco asusta por las páginas, pero precisamente por su estructura, por el tipo de libro que es, se puede leer así, por capítulos y, mientras, seguir leyendo otros libros.
EliminarSobre el cómico, como asignatura pendiente que es... nos vemos en septiembre :P
Besos!
Veo que no has tenido demasiada suerte con los libros elegidos, salvo alguna honrosa excepción. Y eso que los dos primeros prometian.
ResponderEliminarBesos
Ha habido de todo un poco, pero también el calor no me ha ayudado ni a elegir bien ni a disfrutar de las lecturas. El de Constantine me dio rabia, pero de todas formas creo que puede gustar a bastante gente.
EliminarBesos!
Pues vaya, yo pensaba que "El plantador de tabaco" se merecería una reseña propia. Por mucho que digas que las hay muy buenas por ahí, a mí las que me gustan son las tuyas :(. Espero que te lo pienses mejor y le hagas un comentario como parece que se merece. La verdad es que yo le tengo un poco de miedín, no me asustan los libros gordos, pero este es tan, tan gordo, que impone. Pero claro, vienes tú y lo tildas de libro necesario, y ahora me tocará comprarlo, grrrrr.
ResponderEliminarEse cómic también pinta muy bien. ¿RRR? ¿Eso es una nueva categoría? Jjj. Estaría bien poder sacarlo de la biblioteca, aunque no sé yo si aquí lo tendrán...
Un abrazo, bueno, en realidad otro... :P
Y se la merece, pero hay muchas y muy buenas y tal como lo he leído y por el tipo de libro que es, yo no le haría justicia. Al principio intenté leerlo del tirón y se me hizo cuesta arriba, no por el libro, sino por mí. Luego decidí seguir leyendo a mi ritmo otros libros e ir leyendo capítulos sueltos de este, y funcionó. Lo aconsejo leer así, sobre todo si el ritmo lector no es muy allá, o incluso es normalito...
EliminarEl cómic me gustó, no pensaba que contendría tanto, pero tiene mucho jugo, de hecho lo releí antes de devolverlo. A ver si tienes suerte en la biblio (¡que la usas muy poco!)
Abrazos varios :)
Tom, pequeño Tom, hombrecito Tom me llamaba bastante y por lo que cuentas parece que mi instinto no va muy acertado, habrá que corregirlo... Eso sí, con tu recomendación, me llevo El plantador de tabaco, que parece que con él no hay pierde :) Muchas gracias por las reseñas.
ResponderEliminarBesos.
No sé Aglaia, lo mismo te gusta, a mí me supo a poco, como si fuera un libro infantil. Se lee bien, eso sí. El plantador de tabaco ya son palabras mayores, eso es literatura seria ;)
EliminarGracias a ti por comentar ¡Besos!
Y el plantador no se merece su propia reseña? Bueno, es el que me llevo apuntado, y el cómic, pero yo es que soy mijitas, me tienen que gustar los dibujos del cómic para disfrutar del todo, y aquí los dibujos no me terminan de convencer. Me lo llevo con interrogantes :-) Un besote!
ResponderEliminarY dale :) Pues claro que se la merece, pero no se la voy a hacer, ea. Es lo que digo, que al haber tardado tanto en terminarlo y por el tipo de libro que es (y que al principio tomaba notas, pero luego ya no) creo que no le haría el tipo de comentario que se merece. Hay reseñas muy buenas ya por ahí ;) Los dibujos del cómic no es que estén mal, están bien, aunque yo suelo fijarme más en otro tipo de ilustraciones, pero el contenido me gustó mucho. Puedes quitarle los interrogantes ;)
EliminarBesos!
Estoy perezosa con los cómics aunque me has tentado con ese último libro que has reseñado. Demasiadas buenas razones para dejarlo pasar. Y El plantador de tabaco me lo llevo bien apuntado, que tiene una pinta maravillosa.
ResponderEliminarBesotes!!!
A mí los cómic me dan poca pereza porque se leen rápido, pero me cuesta elegir, eso sí, porque no me van los superhéroes y de esos abundan muchos en los cómic (al menos en mi biblioteca). Te "llevas" un buen libro, desde luego :)
EliminarBesos!
¡Cuántas cositas, amiga! Vamos por partes.
ResponderEliminarLa novela negra nórdica es pura pereza. Fíjate que ése título bien podría haberme engañado, por aquello de ser diferentes y tal. Pero los autores, como los padres, nos están hechos para ser nuestros coleguitas, sino para contarnos (y bien) una historia.
El de Barbara Constantine, igual, me habría engañado con tan bonita portada, título y sinopsis. Pero a mí eso de que me busquen la lágrima con toda la intención… me cabrea y todo.
Me quedo con ganas de saber más de ése plantador de tabaco, aunque reconozco que tremenda extensión me tira para atrás, ¿tan buena es, de verdad?
Y ése cómic… últimamente le estoy cogiendo el gusto a estas cosas, igual me animo con él.
Besitos.
Oye, hay novela negra nórdica buena, eh: Henning Mankell por ejemplo. O Johan Theorin. Pero nos cuelan mucho bodrio con la moda y eso. Jejeje... me ha hecho gracia eso de los padres y los autores... muy aguda, Mara ;)
EliminarPues ese engaño que te has evitado es el que me llevé yo con Constantine, esa portada, la sinopsis... En fin, que a lo mejor a ti te gusta, a mi me dejó bastante fría.
¿Es bueno El Quijote? Aplica la respuesta al plantador y sabrás qué hacer. Eso sí, repito por enésima vez: no es para leer del tirón, capítulos sueltos y alternando lecturas.
Si le estás cogiendo gusto al cómic tira para adelante con este. Y yo espero que me lo cuentes
Besos!
Vaya! Me he quedado un poco chafada con el de Barbara Constantine, pues lo tenía apuntado y la verdad es que le tenía ganas...
ResponderEliminarEn cuanto al cómic, me lo llevo apuntado, que tiene buena pinta.
Abrazo!
Zamarat, que a lo mejor a ti te gusta. Así como otros libros no los recomiendo de ninguna forma, con este soy consciente de que puede gustar, a mí no me convenció. Ya nos contarás del comic, me gusta saber :)
EliminarAbrazo!
Una pena la primera reseña express. Me tenía muy buena pinta pero a medida que la leía ya decía que iba a ser que no me la apuntaba. La que sí me ha puesto los dientes largos, que se dice, es El plantador de tabaco. No me asusta el número de páginas que tiene. Lo que importa es que se ve que es una historia que engancha y está bien narrada. Desconocía por completo la existencia de esta editorial. Besos.
ResponderEliminarLo dicho, esta moda de novela negra nórdica trae cosas que no están al nivel de mucha novela negra de por aquí. Pero claro, movidas editoriales... El plantador de tabaco es un clásico. Y a los clásicos hay que leerlos, aunque sean clásicos modernos ;) Sexto Piso es una editorial con cosas muy interesantes, no la pierdas de vista.
EliminarBesos
El que por título y sinopsis me parecía interesante es el primero, La resurrección de los muertos, lástima que luego no cumpliera! El libro de los Tom... ya no me atraía mucho como tampoco el cómic (al menos de momento hasta que me dé de nuevo la fiebre), el que sí me apunto de todos ellos es El plantador de tabaco!
ResponderEliminarPor cierto... son las 11 de la mañana y voy en sandalias y tengo los pies.. no fríos, helados!!!!!!!!!!!!!!! que no me gusta el calor pero... hoy hace frío jajajaj si parece que vaya a quedarme cómo la pareja de ricos acaudalados de la novela! hoy lluvia no te puedo mandar... pero frío...!!!
EliminarA mí el primero me gustó al principio, pero fue de mas a menos y en picado. Creo que es una serie además, ya sabes, ya hay pocos libros con detective por medio que se quede en un único libro autoconclusivo.
Eliminar¿frío? ¿qué es eso? no recuerdo ya esa sensación térmica... ¿vivimos en el mismo país? :P
Besos!
Pueees hay donde elegir....pero me quedo tan solo con El plantador de tabaco que creo que puede gustarme.
ResponderEliminarUn beso!
No es obligatorio elegir, claro :) Los libros nos eligen y nosostros nos dejamos querer ;)
EliminarBesos!
Lo del Plantador igual en un futuro pero es que nunca he sentido la necesidad de leer el Quijote, ¡qué se le va a hacer! De los que no te han gustado nada lo tendré en cuenta para ahorrármelos, muchísimas gracias, al de la nórdica ya le vale y la de Tom qué hace, ¿escribir la lista de la compra o qué? D gráfica no soy pero me alegro de que hayas acertado y que te haya hecho pensar y sentir.
ResponderEliminarBesos
Pues si no has sentido la necesidad de leer El Quijote, no sé yo si este plantador de tabaco te llamará. Jejeje, no es que haga la lista de la compra Constantine, pero es un recurso no necesario, quizás de la sensación de fluidez, o es una manera de sostener una historia a la que le faltan muchos flecos. ¡Y yo qué sé! :D Dále una oportunidad a cómics e ilustrados, mujer, hay cosas muy interesantes.
EliminarBesos
Magnifico el blog, como siempre de tus express me quedo con El plantador de tabaco, y seguiré tu recomendación, leyendo hoy un capítulo, otro día otro, saludos :-)
ResponderEliminarQué gusto verte por aquí. El plantador de tabaco te gustará, pero es difícil leerlo del tirón, mejor a capítulos y alternando con otras lecturas.
EliminarUn abrazo!
No conocía ninguno de los títulos que nos traes, me llamó la atención el segundo pero el estilo de frases cortas no me gusta nada así que se me haría pesado así que creo que finalmente y aunque son varios títulos no me llevo anotado ninguno
ResponderEliminarBesos
En realidad las frases cortas son un recurso que puede dar dinamismo a la historia, pero en este caso como la historia no me consiguió llegar pues el recurso en cuestión se me hizo pesado, superfluo. Tú lista me mira bien ;)
EliminarBesos!
NOOOOOOOOOOOO! Acabo de comprar 'El plantador de tabaco' junto a otras cosas, de la misma casa editora. El sábado pasado platicaba con uno de mis libreros más jóvenes, quien consideraba el libro de Barth como 'luminoso' -término que él acuñó-.
ResponderEliminarPerece que estamos en sintonía, Ana. Lo cierto es que me gustaría que armaras una reseña completa de él -cuando puedas-. Creo que su extensión lo amerita.
Un beso grande para ti!
Sintonía!! No comento todo lo que leo y en este caso ya digo las razones, la forma de leerlo y el tipo de libro que es. Y que hay reseñas muy buenas a las que no añadiría ni una coma. Lo mismo que no sabría comentar El Quijote ¿qué voy a decir que no esté dicho ya?. No sumaría nada. Sólo pongo mi granito comentando que quien ame la literatura, debe pasar por este libro.
EliminarBeso!
Como soy de las que están leyendo El Qujote poco a poco, me apunto tu recomendación de "El plantador de tabaco". A ver si consigo tomarlo a pequeños sorbos y disfrutarlo tanto como El Quijote. Abrazos.
ResponderEliminarValiente Marisa! Si después de leer El Quijote te pones a leer El plantador de tabaco habrás alcanzado la cima de un Everest literario al que pocos acceden ;) La idea de lectura es la misma y se disfruta exactamente igual.
EliminarAbrazo!
de Neuman tengo en casa esperando El viajero del siglo, dicen que es su gran obra hasta la fecha.
ResponderEliminarbesos!
Posiblemente por ahí tendría que haber empezado, por El viajero del siglo, pero siempre intento leer otro libro antes de llegar al que se considera el mejor del autor.
EliminarBesos!
A tono con tus reseñas exprés. Los dos primeros me los salto: al hoyo. Los dos últimos me los llevo: a la lista y el de Barth bien subrayado, remarcado y con estrellas. En cuanto a Neuman, te recomiendo El viajero del siglo. De las tres novelas suyas que he leído me parece la mejor. Este título no lo conocía, pero es que los relatos se me resisten y creo que este tampoco me lo llevo.
ResponderEliminarBesos
En el hoyo están bien, al menos en el mío :) Y te llevas las joyitas de las express. De Neuman tengo El viajero del siglo pero soy dada a dar rodeos :) No te resistas a los relatos, pero estos no serían desde luego los ideales para que el género te convenza.
EliminarBesos!
Me encanta tu concepto "reseñas express"
ResponderEliminarSolo he leído El plantador de tabaco y es una joya, estoy totalmente de acuerdo contigo.
Aquello de destrozar "la vida es bella"... ¿A quién hay que matar?
Besos
Cita
El plantador de tabaco es una lectura necesaria, cada cual en su momento, pero lo mismo que El Quijote es obligatorio y todo un clásico, este plantador irá escalando puestos entre los lectores. Eso espero porque se lo merece.
EliminarPues habrá que matar a Barbara Constantine. Que es que vaya manía, que parece que hay películas que todo el mundo conoce el final. Pero no. Siempre hay gente que todavía no las ha visto. Mal, mal.
Besos!
Del segundo había oído hablar y sentía curiosidad... Ahí lo dejo... Besos
ResponderEliminarDicen, se rumorea, que Al mal tiempo, buena cara está mejor. Habrá que darle una oportunidad. No sé qué me pasa con el cine y la literatura francesa, pero me llevo cada chasco...
EliminarBesos!
Tomo buena nota de "El plantador de tabaco". Por cierto, no sé si te quedarán ganas de darle una segunda oportunidad a Barbara Constantine... Bueno, si te animas, que sepas que "Al mal tiempo, mejor cara" de esta autora, me hizo pasar muy buen rato: divertido, con encanto, feliz, solidario, diferente. Bss
ResponderEliminarBien anotado está Mónica. Me quedan ganas, sí. De hecho es el libro de Constantine que tenía previsto leer, pero vi este en la biblioteca, me gustó la portada y... Yo y mis rodeos :)
EliminarBesos!
A dos de esos escritores los tengo pendientes (Barth y Neuman), también hace tiempo que quiero echar el diente a alguna novela gráfica, que a mí también me encantaban los tebeos.
ResponderEliminarYo tengo tantos autores pendientes que a veces me da hasta un poco de vértigo ;) Hay novelas gráficas muy interesantes, yo me estoy encontrando muchas sorpresas agradables la verdad, aunque me resulta difícil buscar en el montonazo que tienen en la biblioteca ;)
EliminarBesos
A "Tom, pequeño Tom, Hombrecito Tom" le tenía ganas así que ahora me dejas un poco fría. Tendré en cuenta "El plantador de tabaco".
ResponderEliminarBesos!!
A lo mejor te gusta, eh. Yo espera algo más de "jugo" de ese libro y esos personajes,.. y fría me quedé yo ;)
EliminarBesos!
Me apunto el de El Plantador de Tabaco, no tenía ninguna referencia de él y me ha parecido genial tu reseña. Muchas gracias.
ResponderEliminarBesos!.
Pues apuntado te lo llevas, Ariel ;)
EliminarBesos!
Leo que continuarás con Neuman y no puedo sino apoyarte en esa decisión. Me parece un escritor para leer y seguir. Hoy leía un artículo suyo en Babelia sobre Cortázar estupendo.
ResponderEliminarComo casi todos tus comentaristas me apunto el El plantador de tabaco
Besos!!
Sí, sí... Ha habido cosas que me han gustado en este libro, lo suficiente como para insistir. Voy a buscar el artículo que comentas ;)
EliminarBesos!
Pues de estos sólo me llevo "El plantador de tabaco". No lo conocía de nada, pero tu recomendación es bastante contundente:)
ResponderEliminar1beso!
Te llevas poco pero bueno ;)
EliminarBesos!
Disfruté mucho de El plantador, más de lo que esperaba y además es voluminoso y lo eché de menos, ese hermano, ese profesor... me encantó.
ResponderEliminarY Neuman también, pero no tiene mérito porque siempre me gusta.
Del resto te cojo uno... o dos :-P
Besos
Es cierto, yo con el atracón inicial pensé que no lo iba a disfrutar, cuando cambié la forma de leerlo ya fue otra cosa :) A Neuman tengo que volver a buscarlo, que no es que no me haya gustado, pero esperaba más y sé que voy a encontrar más :)
EliminarDel resto coge lo que quieras, a tu "dispo" ;)
Besos!
No he leído ni conocía ninguno -para variar jeje- pero definitivamente, el super happy no me llama nada.
ResponderEliminarBesos!
¿Ninguno? :( Te tengo que sorprender algún día con algo que conozcas y que incluso hayas leído :P
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Hola Ana, interesante entrada. De Andrés Neuman leí "El viajero del siglo" y me resultó muy interesante. Tal vez quieras seguir con él. Cariños...
ResponderEliminarSí, todos me recomendáis El viajero del siglo, dejaré de dar rodeos e iré por él. Claro que quiero seguir, lo que atisbé en este libro no me ha hecho desistir, más bien al contrario ;)
EliminarBesos!
Me interesa el de "Los combates cotidianos", por el tema y también que sea ilustrado (no suelo leer cómics). Me lo apunto y te cuento.
ResponderEliminarGracias.
Valiente, ya veo que te lanzas a los ilustrados. A mí me gustan, aunque me cuesta escoger, porque no soy de manga ni de superhéroes... Ya me contarás.
EliminarGracias a ti. Besos!
"El plantador de tabaco" suena genial. Eso sí, se ve que es un tocho, así que tendré paciencia. Espero que lo compares con El Quijote por lo importante, y no por el estilo narrativo, sino puede resultarme soporifero xD.
ResponderEliminarP.D. Por cierto, no conseguí hacerme con "La balada de Iza", que me propuse leer antes del fin del verano, así que me tuve que conformar con "La puerta", también de Szabó, así pruebo a la autora. Cuando consiga hacerme con el primero ya comentaré mis impresiones. ;D
Bea, El plantador de tabaco no te lo leas del tirón, es para leer alternando con otros libros, a ratitos, a capítulos, sino te costará mucho más leerlo. La balada de Iza yo lo saqué de la biblioteca, vi que no estaba fácil y que lo tenían así que... La puerta lo tengo en el montón de inmediato junto a otros tres, de momento ya se le ha adelantado uno, pero no tardará en caer, ya comentamos ;)
EliminarBesos
Voy a buscar al plantador de Tabaco :)
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