La diferencia entre misterio y secreto está en que el misterio no es susceptible de resolverse. La vida es misteriosa, no secreta. Y las intenciones pueden ser secretas, pero no misteriosas. También pueden ser buenas o malas, hay un dicho al respecto: que el infierno está lleno de buenas intenciones. Y eso ya nos dice mucho del contenido de este libro.
Gaige construye un personaje protagonista fascinante y complejo. Un protagonista manipulador y egocéntrico. Y es que cuando todo se construye en torno a una mentira, al final las intenciones nunca, jamás, son buenas. La verdad más pura siempre está en quien es capaz de conmoverse, pero no con y por uno mismo, no con autocompasión, sino conmoverse con el otro y por el otro.
Al final… al final nos pasarán la cuenta y todos tendremos que pagar y declarar el verdadero color de nuestros actos. Poca escapatoria hay, por mucha confusión que exista entre quienes creemos ser y quienes realmente somos, por mucho que construyamos una narrativa personal con relatos que se ajusten a nuestros intereses… nos pasarán la cuenta y habrá que pagar. Fin de la historia.
Esta es una novela inteligente y muy bien escrita sobre una personalidad narcisista, una personalidad profundamente manipuladora. Gaige profundiza sobre la paternidad y las identidades que adoptamos y lo hace a través de un personaje de esos que detestamos a la vez que nos atraen poderosamente. Algún nombre tendrá eso, pero mientras lo encuentro os digo que este libro me agarró con la pericia de una araña atrapando a una mosca. Tejiendo muy bien. Detestas al personaje pero lo comprendes y hasta a veces sientes ternura por él, una ternura del mismo calibre que el desprecio. Emocionalmente esto es inquietante y, a la vez, una virtud narrativa de Gaige. Una novela muy equilibrada sobre el desequilibrio.
Que alargada es la sombra de Nabokov y su “Lolita”...
Gran reseña. Me apetece leerlo. Lo pongo en la lista. ¡Gracias!
ResponderEliminarMe ha encantado. ¡Gracias!
ResponderEliminar¿De nada! Gracias a los libros ;)
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Ana,
ResponderEliminarse me ocurre al hilo de lo que dices con y del libro, es que el otro día pensaba que me gustaría responder y comprender, incluso copiar, a eso que ya saben lo que son y lo que quieren en la vida desde chiquitos, yo nunca lo sabré , pero supongo que ahí está la gracia, en reinventarte, en eso que yo defiendo que es la entropía vital, lo demás es tan aburrido...
gracias Ana