martes, 22 de diciembre de 2020

Las buenas intenciones (Amity Gaige)


Comenzaba a percibir que había una diferencia entre secretos y misterios, y que, por desgracia para él, la vida era un misterio y no un secreto, lo cual significaba que nadie la poseía y, por lo tanto, que nadie podría hacerla transparente para él, así que ninguna muerte ofrecería una respuesta

La diferencia entre misterio y secreto está en que el misterio no es susceptible de resolverse. La vida es misteriosa, no secreta. Y las intenciones pueden ser secretas, pero no misteriosas. También pueden ser buenas o malas, hay un dicho al respecto: que el infierno está lleno de buenas intenciones. Y eso ya nos dice mucho del contenido de este libro.

Gaige construye un personaje protagonista fascinante y complejo. Un protagonista manipulador y egocéntrico. Y es que cuando todo se construye en torno a una mentira, al final las intenciones nunca, jamás, son buenas. La verdad más pura siempre está en quien es capaz de conmoverse, pero no con y por uno mismo, no con autocompasión, sino conmoverse con el otro y por el otro.

Al final… al final nos pasarán la cuenta y todos tendremos que pagar y declarar el verdadero color de nuestros actos. Poca escapatoria hay, por mucha confusión que exista entre quienes creemos ser y quienes realmente somos, por mucho que construyamos una narrativa personal con relatos que se ajusten a nuestros intereses… nos pasarán la cuenta y habrá que pagar. Fin de la historia.

Esta es una novela inteligente y muy bien escrita sobre una personalidad narcisista, una personalidad profundamente manipuladora. Gaige profundiza sobre la paternidad y las identidades que adoptamos y lo hace a través de un personaje de esos que detestamos a la vez que nos atraen poderosamente. Algún nombre tendrá eso, pero mientras lo encuentro os digo que este libro me agarró con la pericia de una araña atrapando a una mosca. Tejiendo muy bien. Detestas al personaje pero lo comprendes y hasta a veces sientes ternura por él, una ternura del mismo calibre que el desprecio. Emocionalmente esto es inquietante y, a la vez, una virtud narrativa de Gaige. Una novela muy equilibrada sobre el desequilibrio.

Que alargada es la sombra de Nabokov y su “Lolita”... 

©AnaBlasfuemia

4 comentarios:

  1. Gran reseña. Me apetece leerlo. Lo pongo en la lista. ¡Gracias!

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  2. ¿De nada! Gracias a los libros ;)

    Un abrazo

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  3. Hola Ana,
    se me ocurre al hilo de lo que dices con y del libro, es que el otro día pensaba que me gustaría responder y comprender, incluso copiar, a eso que ya saben lo que son y lo que quieren en la vida desde chiquitos, yo nunca lo sabré , pero supongo que ahí está la gracia, en reinventarte, en eso que yo defiendo que es la entropía vital, lo demás es tan aburrido...
    gracias Ana

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En este blog NO se hacen críticas literarias ni mucho menos reseñas. Cuento y me cuento a partir de lo que leo. Soy una lectora subjetiva. Mi opinión no convierte un libro en buen o mal libro, únicamente en un libro que me ha gustado o no. Gracias por comentar o, simplemente, leer