sábado, 1 de agosto de 2020

Los tiempos del esplendor (Lídia Jorge)


Sólo donde no hay amor no hay culpa

Y así, con una sola frase de ocho palabras, se desmonta el bucle de la culpa, de culparse de sentirse culpable. Una frase y la culpa se vuelve redentora. La identidad construida también a golpe de culpa porque hacernos habitables incluye la belleza, pero también lo que nos atormenta. Ser habitable es convivir con todo aquello que somos y a lo que pertenecemos.

Qué maravilla descubrir a Lídia Jorge (de nuevo literatura portuguesa), qué historias más asombrosas las de este libro, qué voz narrativa tan vigorosa en cada relato. Qué placer

En los libros de relatos una de las mayores dificultades para el lector puede ser el tránsito de uno a otro, soltar una historia y dejarte atrapar por la siguiente. Si bien la voluntad y la gestión de la lectura de los relatos está en manos del lector, no cabe duda de que quien los escribe ha de tener la capacidad para atraparnos en cada historia, mantenernos ahí, despedirnos de una historia y unos personajes, y mantener esa capacidad en uno y otro relato, en un enredo cómplice. Lídia Jorge lo consigue, vaya si lo hace.

Seamos claros, seamos extensos, seamos enteros

La sencillez del lenguaje narrativo es una herramienta de apariencia engañosa (pero muy eficaz) para penetrar en toda la enmarañada complejidad de las personas, la sociedad… la vida, y poder así desbrozar el caos mostrando de qué está hecho. Clarificar la memoria para no olvidar. De eso va también la vida.

El último relato es (también, o además de otras cosas) una fina e irónica metáfora sobre el carácter y la literatura holandesa, francesa, checa e inglesa… narrado por una autora portuguesa. Y también es un gran cierre en el que, de nuevo, lo esencial puede contarse sin artificios, con el poder de una síntesis inteligente

¿Quién decide? ¿Cómo separar este momento del que vendrá después, para poder decir: y entonces fue así?

2 comentarios:

  1. Interesante propuesta para alguien que en literatura portuguesa no ha ido más allá de Pessoa.

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    Respuestas
    1. Apunta también a Gonçalo M. Tavares y a António Lobo Antunes y te llevas un excelente trío 😉

      Un abrazo.

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En este blog NO se hacen críticas literarias ni mucho menos reseñas. Cuento y me cuento a partir de lo que leo. Soy una lectora subjetiva. Mi opinión no convierte un libro en buen o mal libro, únicamente en un libro que me ha gustado o no. Gracias por comentar o, simplemente, leer